sábado, 2 de febrero de 2008

I still beleve in Bogotá

Este lunes iniciaron mis clases, con la sorpresa de que los maestros huevones existen en todas partes, lo bueno es que son sólo dos clases, las otras están pesadonas. En fin mi horario está sabrosamente tempranero entro casi diario alas 7 de la mañana. Y el único día que entro a la 1 de la tarde fue el día en que perdía la confianza en esta ciudad.

Carai no se asusten solo fui víctima de 3 mujeres que me engatusaron de una manera ruin, de verdad me ha costado trabajo asimilarlo. Me robaron mi ipod y el celular de una amiga. Imaginan que yo iba caminando con gran disposición, preparé mis alimentos para no gastar en la calle, encendí mi música y emprendí el viaje a pie, bajé tres cuadras de mi calle a la avenida, caminé unas 4 cuadras más cuando de repente sentí como que algún líquido había caído a mi pelo y hombro seguí caminando cuando de repente se acerca una mujer “pero mijita que te paso ese gamino …!”

Sentí confianza , total caí me limpiaron con rollo de papel y en menos de lo que pensé ya no tenía nada corrí por que me dijeron que venia alguien con un “Chuzo” (arma) en fin me robaron con la confianza que esas personas poseen de las calles. Impunes y deseosas de más. ¿Sabían que según una encuesta realizada hace unos años 60% de colombianos si ve la oportunidad de cualquier cosa se aprovecha de los demás? En fin este país, ésta ciudad tiene historias por contar.

Los demás días pues todo tranquilo, solo un ser paranoico se estacionó en mi, jaja pero todo tranquilo he comenzado por disfrutar de la vida nocturna, o como dijeran acá de la rumba bogotana lo que me corrobora el hecho de que la ciudad no tiene sólo que hambre en sus calles.

1 comentario:

Adorable efigie dijo...

mmm... no suelo hacer esto, pero viendo que te encontré por mera casualidad buscando algunas fotos de Los Cerezos 61 pues te escribo un comentario preguntándote si sigues allá... llego a esa residencia el 16 de julio. Espero que aún veas este blog. En fin, saludos...