lunes, 4 de febrero de 2008

¡Libertad, libertad!


BOGOTÁ.- Todo comenzó como una propuesta de grupo en el famoso sitio de internet “Facebook”, hoy Colombia y 180 ciudades del mundo vivieron una nueva realidad. El día de hoy marca un evento trascendental en la historia política de este país. Colombia se revela ante la violencia y une sus amos en pro de la Paz.

A las diez treinta de la mañana, estudiantes, docentes, madres, niños, ancianos, servidores públicos, extranjeros, indigentes, gente trajeada, unos más arreglados que otros pero todos al unísono de la paz salieron a las calles más circuladas de la capital colombiana para manifestarse en contra de la violencia, el objetivo: la Plaza Bolívar donde se unirían las fuerzas ciudadanas por la libertad , la paz y la vida en Colombia, en pocas palabras todos unidos en contra de la violencia. Y digo violencia y no las FARC por que el Estado colombiano no se salva, los paramilitares en buen intento han colapsado al vida de miles según acusaron los ciudadanos el día de hoy.

“No más secuestros, no más mentiras, no más muerte, no más FARC” las calles cimbraban de la energía contenida.

EL trayecto fue emocionante, poco a poco sentí que mi piel chinita, caminé junto a un grupo de familiares de secuestrados, su voz era sincera, no más secuestros, no más mentiras, no más muerte. Calles y calles de gente esperando llegar a la Plaza Bolívar, un centenar de medios de comunicación, cámaras en casa vuelta de ojo

Otros grupos dirigían sus reclamos al presidente Chávez ¿Porqué no te callas?

El cielo, aun vigilado por helicópteros de la policía y la armada se pintó de blanco; desde los edificios adornados con banderas, miles de papeles caían en señal de apoyo. El transporte público sonaba su claxon, otros con mejor fortuna como los de transmilenio se unieron a la marcha (ocasionando un caos vial y sobre demanda de camiones).

Sin duda los que hicieron su agosto fueron los vendedores ambulantes que entre playeras, paletas de hielo, agua, silbatos, banderas, obleas, papitas y sandía fresca ofrecieron a los transeúntes un festín culinario y de parafernalia oficial, digno de una gran manifestación. No faltó quien hizo su mayor esfuerzo por llevar los mejores equipos de manifestación sombrilla de cabeza , radio, megáfono, tambores, ajuares singulares, disfraces simulando el silencio, pancartas con miles de mensajes unos contradictorios a otros pero la neutralidad de la ropa blanca que más de dos millones de personas vestía, según datos oficiales fue lo que prosperó.

!El pueblo unido en contra de la FARC! se escuchaba en la gente. El cansancio, los pies hinchados, la voz ronca y la piel quemada por le sol de esta mañana de 4 de febrero valieron la pena.

El saldo del día: masas contentas y el Estado colombiano curado en salud, auspiciando y capitalizando una propuesta que al parecer fue ciudadana, con el fin de legitimizar sus acciones (poco pacíficas) y engrosar la popularidad del presidente, que por cierto no estuvo presente.


No hay comentarios: